Material de construcción consistente en una mezcla aglomerada de cemento blanco, coloreado o no, con guijarros de piedra natural. La piedra puede ser de cualquier tipo: mármol, granito, cuarzo, etc. Se comercializa en baldosas de distintos tamaños con la cara pisable normalmente pulida y abrillantada, si se instala en interiores, y la cara dorsal en aspecto tosco de mortero de cemento para facilitar el agarre. También se puede fabricar y extender «in situ» formando suelos continuos de buen aspecto y calidad, frecuente en edificios públicos, grandes vestíbulos, pasillos, etc. Una vez fraguada (endurecida la mezcla) se procede al pulido y abrillantado de la superficie.
